Cuando no te queda nada y te quedas en la calle, al menos te queda la calle.
Heme aquí, frente al teclado, sin tener una idea clara de cómo fue que mi blog perdió todo el tráfico hasta llegar a - literalmente- cero, nada. Durante los dos años anteriores el descenso fue imparable, al inicio imperceptible, hoy por hoy… es un sitio completamente olvidado por el único buscador del mundo. Justo cuando llegó un momento cuando parecía ser rentable, incluso llegué a plantearme dedicarme por completo al blogeo; carajo, dejaba suficiente ganancia como para resolver mis asuntos financieros primordiales. No supe cuál era la enfermedad que le aquejaba. En mi desesperación intente de todo para recuperar su gloria pasada: éliminé cientos, quizás miles de artículos, cada semana (quizás cada tercer día) modificaba la plantilla, la posición en la cual estaban colocados los anuncios, pedía consejos para mejorar el contenido, aprendí y subsecuentemente apliqué técnicas de mejora en el posicionamiento del buscador y, al final, nada de ello resultó de alguna utilidad.
¿Qué terapia es ésta?
Estoy recordando una historia que le escuché a Jorge Bucay, sobre un tipo que va a terapia porque sae caga encima. No la voy a reproducir aquí, mejor compra el libro o escucha el audiolibro; lo que sí te diré es que al fin de la historia el susodicho acepta que se caga encima, pero ya no le importa.
Bien, yo no he llegado a tanto; no estoy contento de haber perdido la alegría de publicar en el blog, menos de perder los ingresos que generaba. Algo he aprendido de todo esto. Me queda la satisfacción de que a pesar de no contar con un manifiesto, mentalmente siempre seguí una línea de acción y moral al publicar los post. Antes que nada, Pulso Digital contiene material apto para todo el público, sin importar del tema que se tratase, por muy delicado o escabroso que éste fuera, siempre lo aquí compartido contenía la máxima objetividad de la que me era posible disponer. Cabe destacar que nunca he publicado un desnudo, ni parches para software original, ni películas pirata, ni ideas para hackeo, entre otras minucias ilegales. Lo que sí, fui penalizado por Google, ya que mi ignorancia no respeté algunas reglas sobre los métodos de promoción de sitios de terceros y el financiamiento externo a mi blog.
¿Qué fue lo que hice más mal?
Muchas de las cosas que no supe desarrollar desde el inicio,. allá por 2007, las averigüe a la mala, luego fue reprendido por tal ignorancia sin más remedio que intentar de recuperar parte de lo perdido. Me explico, en un inicio no colocaba nada de publicidad en Pulso Digital, luego puse anuncios en donde mejor me parecía a mí, después acepté el patrocinio directo y los artículos con enlaces a sitios que me pagaban por decir cualquier cosa* buena o mala - de algún negocio en la red. Las sumas de tales servicios se acumulaban, siendo mediante paypal que podía cobrar por trabajos de éste tipo de patrocinadores radicados en los más diversos países de habla hispana. Individualmente no pagaban mucho, a la larga se iba engordando el marranito y tales montos me ayudaban a que pudiese adquirir material para el blog. Destinia fue uno de los constantes, los casinos eran quienes mejor pagaban y Zync fue un dolor de cabeza permanente, por mencionar a algunos. Google, por otra parte, me suministró un espacio en Blogger, de lo cual me arrepiento desde casi el comienzo, ya que al parecer su sitio de blogs es un hijo bastardo olvidado, del cuál se acuerdan cada dos años de darle una paleta de chocolate. Adsense al principio no daba nada, luego daba poco, por un momento dio mucho (sólo un mes) y después de dejarme disfrutar la gloria y hacerme creer como a la Lechera del cuento, que podía disponer de un futuro cierto con lo ganado con ellos. O mai gad ! Pero que tonto fuí.
Lo de los casinos fue mi primer error, los enlaces que patrocinaban no eran (ni lo son) del agrado del buscador de colores. Los artículos que solicitaban tales empresas no eran tediosos y si muy lucrativos; uno solo equivalía a seis meses de trabajo en Zync. Google dijo que nada más eso no estaba bien según sus normas, por lo tanto elimine los que tenía. Luego no le gustaron los artículos en los que se mencionasen consejos de salud y menos los de los temas de sexualidad. Como dije, incluso cuando en el blog leen de sexualidad, se trataba el tema de manera humanista, pero eso los bots de Google no lo entendían, si ellos dicen que de sexo no, pues no, y se chingan. Hay que entender que uno no es libre de decir lo que uno quiera y esperar que Google lo respete. Para nada, si uno quiere ganar dinero con Adsense, debe apegarse a las reglas de contenido.
Como seguí siendo castigado, sin nadie a quien preguntar cuáles artículos no eran correctos, tuve que eliminar todos aquellos que mencionaron marcas de productos, como el mismo Google, Yahoo!, Microsoft, Adsense, Pepsi… y un largo etcétera. Traslade algunos de esos artículos a otros blogs, mismos que a pesar de indicar cual es la temática establecida, están bien muertos en cuanto a visitas. No los van a ver nadie, nunca, ni de error.
¿Con melón o con sandía?
Sólo me detendré a decir que reitero mi error en elegir a Blogger como plataforma para el bloggeo. Si ustedes piensan abrir uno para sí mismos, elijan sin duda a Wordpress.
Volviendo a la frivolidad de mi relato.
Además elimine los enlaces a otros sitios, los códigos java, los scritps de servicios de terceros, los contadores de visitas, los protectores de contenido y cualquier cosa ajena a texto y Adsense. En Webmastertools simplemente te dicen: La estás cagando. Pero lamentablemente no te dicen cómo la estás cagando, ni lo que que tienes que hacer para limpiar la porquería. Los fotos de ayuda son tan o más inútiles que las ventanas de ayuda de Windows y, por qué no decirlo, es más fácil encontrar un billete de 500 dólares que la ayuda que necesitas para que un blog opere de manera correcta sin tener que ser un genio de la programación.
Un día, después de meses y meses de esfuerzo; de horas y horas de moverle, de picarle, de hacer ajustes, de repente me quitan el castigo. Para entonces el sitio ya no era el mismo. Perdí seguidores, posicionamiento y dinero. Dejé de escribir constantemente y porqué no decirlo, la ilusión de mantener al elefante blanco en que se convirtió Pulso Digital. Antes cobraba un cheque cada mes, ahora pasa cada cuatro meses, si es que bien me va; no gracias a Blogger, sino a Youtube, que, a pesar de que no publico muchos videos, y no lo hago desde hace mucho tiempo, me deja más dinero con menos esfuerzo que el de escribir y compartir datos curiosos.
De Bing ni hablar. Por medio del buscador de Microsoft no llegan ni los extraviados. De donde si llega tráfico es de los buscadores que se instalan sin querer queriendo. Llegan más visitas incluso que de Google. Me pregunto si habrá un modo de obtener ganancias con ellos. No lo se.
También he pensado en seguir varias ideas en diferentes blogs. Pero tengo que afrontar que, el que mucho abarca, poco aprieta. Por ejemplo, quiero hacer un proyecto fotográfico 365, un blog de cocina, otro de videoblog, pero me da gueva tener que entrar y salir de diferentes cuentas. Si lo hago en Pulso Digital quizás nunca nadie se entere de lo que hago, pero si mal no recuerdo no comencé a hacerlo por dinero.
Entonces…
Seguiré el proceso de sanación, llegando a la aceptación de que mi blog está muerto para Google, que nada lo revivirá ni como zombie, que compartir contenido en Google Plus es como sembrar palomitas de maíz, y que mi pasión no ha muerto con las ganancias. Tengo la idea de seguir al pie de las letra los consejos de 31 Days to Building a Better Blog de ProBlogger, para ver si resulta que al final de cuentas logro sacar a flote mi barco hundido.
Mi blog, hasta suena raro decirlo. mi blog…. mi…. blog. Mi blog que sufre las consecuencias de no tener un dueño que sepa leer los mensajes cripticos de Google para corregir los errores que contiene, mensajes que contienen la clave para reparar la destrucción por desesperación a la que lo sometí.
¿Te pasó algo similar? Cuéntamelo, estaré esperando tus comentarios. Le voy a echar más ganas al blog, esperando que lo veas crecer de nuevo.
Primer comentario!
ResponderEliminarOk, no.
Estimado Francisco.
Hace nueve años en noviembre por necesidad con mi familia iniciamos un Cyber (que siendo yo el más informatico tuve más responsabilidad), como parte de mi nueva condición me vi en la otra necesidad de ver que hacer para que las horas de cuidar pasaran más amenas,no recuerdo cuales fueron las palabras que tuve que teclear en Google, pero apareció tu blog, eran otros tiempos y no había Facebook, al menos para mi y pasaba horas navegando entre el tuyo y otra camada de blogs viendo si habían actualizado algo para leer.
Los tiempos cambian, los días de gloria en mi local han pasado porque la gente tiene acceso a celulares, pero también ha cambiado la forma en que la gente ve contenido, otros blogs como larevo.org hazmeelchingadofavor.com o yanilachingan.com luchan por existir la revo lleva meses tirado.
qué quiero decir con todo esto? No sé, en realidad nada. Sólo quería hacer alarde de mi antigüedad en tu blog, que una vez le perdí el rastro y no tenía Google Chrome y su sincronización, pero lo encontré de nuevo y seguí leyendo, después no sé que pasó, confieso que ya no lo hago ¿qué nós ocurre? Eres tú o soy yo?.
En cualquier caso aquí estaremos, y me daría gusto que como el fénix resurja de las cenizas.
Un saludo!