En tiempos de calor todos nos preguntamos cómo controlar esa terrible plaga que nos quita el sueño con su zumbido e irrita la piel con sus piquetes. Los medios más comunes son los repelentes: fórmulas con un ingrediente actico que se aplica en la epidermis para que nuestro cuerpo deje de atraerlos. Existen algunos repelentes sintéticos y otros elaborados con elementos naturales. Ambos se presentan en forma de aerosoles, lociones y espumas. El usuario debe probar con varios hasta dar con uno que le funcione, pues la efectividad depende de diversos factores, como la especie de mosquito presente el en lugar, las condiciones ambientales, la edad, el sexo y el nivel de actividad del usuario. Deben aplicarse con cuidado siguiendo las instrucciones del envase. Tradicionalmente se asegura que comer plátano, ajo o vitamina C aleja a los mosquitos, pero no hay pruebas concretas. Tampoco existen evidencias de que funcionen los aparatos que emiten sonidos especiales para mantener alejados, incluyendo un reciente programa del iPhone. Otra modalidad tradicional de liberarse de ellos consiste en colocar mosquiteras (mallas de alambre con entramados muy finos) en las ventanas o, recurrir a los insecticidas.
Como dato curioso, en 2007, el Smithsonian Nacional Park de los EEUU nombró al mosquito anopheles hembra como el animal más mortífero sobre el planeta. Responsable de la muerte de un poco más de un millón de personas en el mundo cada año.
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