¿Por qué la orina es de color amarillo?

Por la presencia de un colorante, llamado urocromo, que se origina en los pigmentos biliares producidos por el hígado. Los cambios en el color pueden asociarse al consumo de algunos alimentos, como ciertos caramelos, el betabel y la zanahoria, o al uso de determinados fármacos, como la rifampicina, que la tiñe de un color rojizo.

Si se presenta un cambio de tono sin motivo aparente y dura más de dos días, hay que solicitar la opinión de un médico. La orina turbia, opaca u oscura denota una infección en las vías urinarias. Si es demasiado clara o muy opaca, puede revelar algún padecimiento hepático.

La orina rojiza suele contener sangre vertida por una hemorragia interna causada por distintos factores: cistitis, cáncer de riñón, inflamación de la próstata, o un golpe reciente en la zona. También se vuelve anaranjada por el consumo de laxantes y complejos de vitamina D. Cuando es verde o de color azul, esto responde, en la mayoría de los casos, al uso de ciertas medicinas.