Los niños y los muñecos de peluche
Existen niños que nunca se separan de sus osos de peluche. Existen otros que siempre llevan consigo el mismo trozo de tela. Y otros tantos no soportan ir a la guardería sin un guante de mamá. Los psicólogos los denominan objetos transicionales, aunque también se suele hablar de objetos de consuelo. Casi siempre se trata de objetos relacionados con las sensaciones de succionar, oler o sentir una cierta textura junto a la cara; suelen ser cosas suaves al tacto y por lo regular asociadas a la cama y al sueño. Las mantas, los peluches y ciertas prendas de vestir están entre los preferidos. Otras veces el pequeño elige algo sorprendente, corno el guante o el frasco de crema que usa mamá. Un amor incondicional Porque, eso sí, es el propio niño quien lo elige. A nosotros puede parecernos feo, antihigiénico, inadecuado o difícil de limpiar. Y probablemente acabará deteriorado, sucio, hecho pedazos... Pero el amor, en este caso, es ciego. Para nuestros hijos sigue siendo esenci...