Para contestar ésta pregunta es preciso saber cuál es la verdadera naturaleza del arco iris. Si realmente el arco iris fuese lo que aparenta ser, no habría razón para que, mientras nosotros lo vemos por un lado, otras personas no lo pudiesen ver por el opuesto, como acontece, por ejemplo, con el arco de un viaducto.
Pero es totalmente imposible que alguien pueda ver el lado opuesto del arco iris que nosotros contemplamos, pues el arco iris está formado por la reflexión y refracción de la luz solar en las gotas de agua que se precipitan en la atmósfera. Por consiguiente, sólo podemos ver el arco iris en la parte del cielo opuesta a aquella en donde se encuentra el Sol.
Si el citado fenómeno se produce merced a la reflexión de la luz en las gotas suspendidas en la atmósfera, las cuales necesariamente están colocadas de modo que el observador queda entre ellas y el Sol, se comprende sin esfuerzo que el arco iris no puede tener reverso.
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