Cómo lograr que el dinero rinda más

¿Eres de los que se deprimen el día de pago porque siente que el sueldo no te alcanza? Déjame decirte que hay formas de mejorar el gasto diario y además de conseguir que se ahorre un poco, y no es brujería. Todo es cuestión de trucos y costumbres.

Hace algún tiempo en televisión transmitían un anuncio del Banco “Banorte” en el que un individuo estaba comiendo tacos en la calle le preguntaba una voz si es que ahorraba, él tipo le responde que no, pues que cómo va a ahorrar si no le alcanza el dinero; esto sucede al mismo tiempo que pide la cuenta y como le sobra algo de dinero lo que hace es pedir otro taco para que la cuenta sea redondee. Es entonces que aparece una cuenta en la pantalla (X cantidad de dinero que cuesta el taco extra por N cantidad de días que come en la calle. Obvio que la suma no es una cantidad enorme de dinero, pero demuestra el punto… los pequeños gastos hacen la diferencia.

Por supuesto que es más fácil culpar a los factores externos, como a la globalización por los problemas de dinero que se nos presentan. Sin embargo es cuestión de nuevas actitudes respecto a la forma de gastar y con esto lograr la salud financiera. Podemos seguir estas recomendaciones:

Elimina los malos hábitos.

Por ejemplo el vicio de fumar, ya que es un gasto a corto y a largo plazo (además de que enfermas tu cuerpo). Una cajetilla diaria multiplicada por 365 días es mucho más dinero que lo que un electrodoméstico grande. Además en el futuro tendrás que desembolsar grandes cantidades para sobre llevar las enfermedades ocasionadas por el deterioro en tu organismo.

No compres productos sólo por la marca.

Y no sólo hablamos del pantalón Levi’s o de los lentes Ray Ban, sino de todos los productos que consumes habitualmente. Es el caso del papel higiénico o la pasta de dientes, no compres guiándote por el embalaje o por la marca, sino por la calidad real del producto. En muchos casos, no en todos, la única diferencia entre uno y otro es el precio. 

Tal vez se podría decir lo mismo de los productos farmacéuticos, pero en cuestión de medicamentos cada quien puede tener una opinión diferente, muchos deciden que lo mejor son los genéricos, otros prefieren las marcas reconocidas de los laboratorios. En todo caso, que bueno que existen alternativas económicas para mejorar la salud.

No lleves las tarjetas de crédito cuando salgas a pasear.

Si has tomado alcohol, aunque sea un poco, la euforia te puede hacer olvidarte de los gastos y comenzarás a usar el crédito compulsivamente para seguir la fiesta, así que cuando salgas a divertirte procura dejar las tarjetas de crédito en casa. Aunque también se puede dar el caso de que se te extravíe o de que te la roben, lo cual sería peor.

Evita los prepagos.

¿Por qué crees que la compañía de cable o de celular desea que sus cuentas se carguen directamente a tu tarjeta? No es porque sean buenas personas que quieren evitarte filas. Sucede que de este modo aseguran su comisión en un día específico, pero pueden disponer de cambios en los cobros sin avisarte, así que hay que tener cuidado. Así que es mejor llevar tu reproductor de MP3 cuando tengas que hacer fila en el banco y paga cuando tú puedas, no cuando ellos quieran.

No comas fuera de casa.

Por supuesto que a todos nos encanta comer fuera de casa, la comida que prepara otra persona resulta más apetitosa; sin embargo suele costar como mínimo tres veces más que los que desembolsaríamos de haberla preparado nosotros mismos. Está claro que si llegas cansado de trabajar, lo menos que quieres es ponerte a cocinar, pero si tomas media o una hora en la noche para preparar lo necesario para la comida del siguiente día, ahorraras no solo el dinero de la comida, sino que tendrás el tiempo para poder disfrutarla.

Olvídate de mantener a ls nuevas tecnologías

Admitámoslo, es bonito leer en los blogs sobre los últimos avances en gadgets, y todos los productos de Apple son geniales, pero a menos que desees tener dinero hasta el fin de mes tienes que olvidar de comprar cuanto artilugio aparezca en el mercado (calentadores de tazas USB, abanicos para corbatas, lectores de huellas digitales). La verdad es que no son necesarios y mantener este gusto puede ser costoso.

El dinero de plástico es el más caro.

¿Pagarías una casa o un auto con la tarjeta de crédito? Por supuesto que no, entonces porqué compras un helado o pagas una cena con la misma. Debes tener en cuenta que las tasas de interés son elevadas y que el pagar el mínimo de la tarjeta es sólo pagar los intereses, si de verdad deseas liquidar las deudas de las tarjetas de crédito tendrás que pagar tres veces la cantidad mínima para disminuir el monto.

Utiliza los cupones y vales de descuento.

Pero utilízalos de forma inteligente, ya que muchas veces son la miel con la que las tiendas atraen a las moscas. Si tienes un cupón de descuento de un producto, sólo compra ese producto, no mires a los lados y no compres nada más, no te dejes seducir por el lado oscuro.

No compres con hambre y con niños

Aunque a mí me gusta ir de compras con los niños, es cierto que cuando ellos van de compañía se gasta mucho más, ya que piden cuanto ven en los pasillos. Además de que cuando traes hambre todo se antoja y el carrito de las compras se llena de cosas que de haber llevado el estómago satisfecho no se habrían comprado.

Si conoces algún otro consejo puedes escribirlo en los comentaros.